Ni el más optimista líder conservador, se pudo imaginar una votación a Cámara de Representantes cercana a los 140 mil sufragios y tres curules casi sin competencia.
Con categoría, la estructura que sigue las orientaciones del exgobernador Óscar Barreto pulverizó a sus rivales y avisó que en 2023 va nuevamente por todos los escenarios de poder regional. Y tienen con qué.
Los actores en la política tolimense que hacen parte del famoso Toconbar, (neologismo de la jerga política que significa ‘todos contra Barreto’) estaban advertidos; las cifras de las legislativas entrarían a operar como una especie de primarias rumbo a los comicios regionales y por supuesto, los resultados encendieron las alarmas.
Mal parados
Antes del 13 de marzo, los liberales sin sonrojarse cantaban por la mayoría de municipios que la candidatura a la gobernación de Mauricio Jaramillo estaba consolidada, sin necesidad de consensos y rodeada de una coalición “invencible”.
Pero en cuestión de horas el mapa se transformó; la lista a Cámara del partido rojo terminó facturando más de 50 mil votos, de los cuales 19.200 fueron para la congresista electa Olga Beatriz González del grupo Jaramillista.
El propio Mauricio Jaramillo había vaticinado que el Liberalismo sería la segunda fuerza en la región (terminó cuarta) y que obtendría dos curules; en las cuentas no estuvieron ni cerca de las proyecciones y según analistas, las reglas de juego para imponer cualquier aspiración cambiarán ostensiblemente. ¿Con qué cara Jaramillo ahora le va decir a sus aliados que debe ser él?
Los llamados a liderar
Paradójicamente, el único que en la coyuntura actual podría darle cuerpo a la alianza ‘Toconcar’ es el Senador Miguel Ángel Barreto primo del exgobernador. Barreto Castillo consiguió en condiciones adversas la reelección, con una votación descomunal fuera del departamento: 39.488 y 29.992 votos en el Tolima.
Es precisamente la credencial y esos guarismos los que legitiman el liderazgo de Miguel que, por lo pronto, según versiones de sus amigos, no contempla alguna clase de acercamiento político con la casa Barreto.
Será necesaria una recomposición de relaciones con el Centro Democrático y entregarle herramientas de confianza a Carlos Edward Osorio para que sume. Osorio Aguiar, crítico y víctima del barretismo que también le apostaba a su fracaso, sería otro aliado de primer nivel en una eventual alianza opositora al barretismo.
Osorio Aguiar en sus primeras declaraciones como congresista electo, literalmente arremetió contra el barretismo por una serie de antecedentes y tendió puentes para establecer conversaciones preliminares con otros sectores.
Mauricio Pinto, excandidato a Cámara y gobernación del Tolima, también sería un estratega de primer orden para liderar el bloque de oposición al oficialismo conservador.
En el Partido de la U, aun no se reponen de la quemada que sufrió el representante Jaime Yepes, quien tuvo que pagar caro la pésima confección de la lista y un desgaste natural producto de 4 periodos, es decir, 16 años consecutivos en el capitolio con poco que mostrar.
En la lista necesariamente tienen que incorporar a Yepes Martínez, teniendo en cuenta que en el pasado firmó alianzas con los hermanos Miguel y José Barreto, lo mismo que el grupo político MIRA, actualmente consentido burocrático en la Gobernación del Tolima y la Alcaldía de Ibagué.
Sin duda, otro que ayudó a quemar el barretismo, es el congresista Aquileo Medina. El gobernador Orozco dejó tirado al primer político no conservador que se le sumó a su campaña en enero de 2019.
Medina Arteaga, trabajador incansable, quien mostró resultados en el congreso, sacó más de 5 mil votos solo en El Espinal y más de 16 mil en el departamento. Muy seguramente querrá ser alcalde de su municipio en 2023, lejos del barretismo. Aquileo se sumaría con gusto al ‘Toconbar’.
¿Y el Hurtadismo qué?
Otro de los interrogantes mayúsculos corre por cuenta del denominado Hurtadismo, el grupo de amigos políticos del Alcalde de Ibagué; aunque no pudieron con la credencial de Jaime Yepes, tiraron línea temprano a favor de Óscar Barreto, y en la recta final, le dieron oxígeno a Miguel.
Al Hurtadismo el escenario presidencial le sonríe entorno a la figura de Federico Gutiérrez, quien viene subiendo en las encuestas y se perfila como el único contendor para pelear la Presidencia contra Gustavo Petro. En Ibagué el Hurtadismo le organizó la primera concentración grande al popular ‘Fico’ en todo el país.
Bajo esa premisa y una evidente incomodidad por hechos de campaña, nadie se atreve a descartar una ruptura total de relaciones entre el alcalde Hurtado y Óscar Barreto de cara al 2023, subrayando el interés y prioridad que tiene Hurtado de poner sucesor ‘propias tropas’, firmando acuerdos estratégicos.
Todos quieren con Choco
Finalmente, el que más valorizado tiene el pase en la actualidad es el Representante a la Cámara José Elver Hernández ‘Choco’ cuya organización se acercó a los 40 mil votos con Alejandro Martínez en una victoria inobjetable.
Técnicamente, el popular ‘Choco’, no tendría razones de peso para alejarse del Barretismo, aunque desde la misma noche de las elecciones pidió a gritos una consulta azul para definir el candidato a Gobernación con Adriana Magaly Matiz Vargas. Si a ‘Choco’ le cumplen y no le juegan sucio, lo mantendrán allí.
La consulta puede ser el mecanismo más democrático para la escogencia interna, no obstante, siempre deja heridas profundas que de inmediato entrarían a capitalizar consejeros de primera línea en el Choquismo, que pujan por un grito de independencia del congresista Hernández Casas.
Hace una semana, cualquier escenario real de competencia al conservatismo sonaba absolutamente improbable, pero con el pasar de los días y los números reposados, se han aterrizado las perspectivas, sin dejar de recalcar que la ventaja a favor de la colectividad azul es larga y bajo ninguna circunstancia, se puede repetir el error de subestimar a una organización Barretista, que supo trabajar y de paso dictar catedra.