El jurista Iván Velázquez Gómez, acaba de ser designado por el presidente electo, Gustavo Petro, como nuevo Ministro de Defensa.
Velázquez nació en Medellín el 12 de mayo de 1955. Es abogado egresado de la Universidad de Antioquia, presidió el colegio de abogados de ese departamento en los 90. En el año 2000 llegó a la Corte Suprema de Justicia donde escaló hasta convertirse en magistrado auxiliar, cargo que dejó en 2012 para llegar a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala.
Pese a que nunca fue magistrado titular de la Corte Suprema, se convirtió en juez, jurado y verdugo de los parapolíticos; sus investigaciones mandaron a la cárcel a por lo menos cincuenta congresistas y dirigentes relacionados con las autodefensas en Colombia.
La malquerencia entre Álvaro Uribe e Iván Velásquez es de vieja data. Velásquez coordinó la Comisión de Apoyo Investigativo de la Sala Penal, encargada de investigar las relaciones entre miembros del Congreso de la República y el paramilitarismo. Para Uribe, su actuar fue político y sus investigaciones fueron viciadas por su ideología.
El trabajo de Velásquez fue investigar los nexos de los paramilitares y los políticos. Según la fundación Pares, Paz y Reconciliación, el trabajo del exmagistrado logró comprobar que el 30% de los integrantes del Congreso 2006-2010, para cuando Uribe era presidente, tenía nexos con grupos paramilitares.
El nuevo Ministro de Defensa fue víctima de persecución del estado e interceptaciones ilegales en el segundo gobierno del expresidente Uribe, a quien le cobran su lucha frontal contra la parapolítica.
Algunas voces en redes sociales rechazaron la designación de Iván Velázquez en el Ministerio de Defensa. El excandidato presidencial, Enrique Gómez, tachó la designación como un “acto de venganza” del presidente Petro.
La senadora María Fernanda Cabal del Centro Democrático, también cuestionó la llegada de Velázquez a MinDefensa.
Iván Velázquez Gómez tendrá varios retos al frente de la cartera de defensa, muchos de ellos propuestos en campaña por el presidente Petro: eliminación del ESMAD, transformación de las Fuerzas Militares, mejorar las condiciones laborales de soldados y policías, acabar con la violación a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario desde las fuerzas armadas, entre otros.