Pierre Eugenio García, como subdirector de Prosperidad Social, supo responder la eterna incógnita elevada hace décadas por el maestro tolimense Darío Echandía: ¿El poder para qué?
Y es que valiéndose de lo que para muchos es considerado un viceministerio del Gobierno Nacional y la cercanía con el presidente Iván Duque, el hijo de Carlos García ha firmado convenios que superan los 150 mil millones de pesos en el Tolima y eso para su entorno, le garantizaría arrancar pisando fuerte una especie de tercería por la gobernación del Tolima 2023.
Representante a la Cámara por el Centro Democrático en el periodo 2014 – 2018, cuando salió elegido con los rezagos electorales de su padre, alcanzando 10.154 votos, nacido en Canadá, pero con orígenes colombo – franceses, Pierre Eugenio García Jacquier, es la “vedette” de las inversiones en el Tolima.
Se convirtió en el líder indiscutible de los famosos convenios de mejoramiento de vivienda, intervención de vías, construcción y/o adecuación de plazas de mercado, entre otros. No ha sido sectario con el presupuesto; gira recursos para liberales, conservadores, de la U, Cambio Radical, Uribistas e incluso sectores no afines con la tendencia ideológica del gobierno.
Hoy el bolígrafo de García no es un Montblanc o un Cartier, es un kilométrico, es decir, un esfero amplio, plural e incluyente, con el que ha firmado millonarios convenios buscando encariñar y comprometer a los alcaldes para su proyecto político personal, un sueño que en coyuntura tan polarizada puede ser posible: ser gobernador del Tolima.
¿Compromiso real?
Pero lo que no ha calculado el administrador de empresas y politólogo, es que detrás de la firma, en la inmediatez hay sonrisas, abrazos y quizás sentencias hipócritas como ¨cuente conmigo¨, ¨lo que haya que hacer¨, “aquí estaremos para usted”; frases hechas de mandatarios cuando necesitan alguna gestión que represente obras e inversión para mostrar en sus municipios.
Los alcaldes más consentidos con miles de millones de presupuesto a través de convenios de vivienda son los de Lérida, Líbano, Herveo, Roncesvalles y Rovira, y todavía en Prosperidad Social, están por salir otras cuantos.
Estos mandatarios responden a una pasajera afinidad y le podrán prometer ‘el oro y el moro’ a Pierre, pero bajo ninguna circunstancia pactarían alianzas electorales con él, por los antecedentes y condición personal de su padre Carlos García, un político que ya consolidó la fama de oportunista, que como águila cuaresmera, aparece solo en elecciones a apagar incendios con gasolina.
Leer: El "redentor" del Tolima
‘Juetera’ guardada
La cuenta de cobro inmediata se la aplicarán al interior de su propio partido. Si nos apegamos a la lógica y coherencia política, Pierre García y su padre, agradecidos con el uribismo y el presidente Duque, deberían estar impulsando decididamente las candidaturas de Mauricio Pinto, Milton Restrepo o Carlos Edward Osorio, pero no es así.
Si bien, con los tres ha intentado llevar la fiesta en paz, su padre Carlos García, el que maneja el menudeo de los acuerdos y las cifras, abiertamente apoya a Gentil Gómez a la Cámara, candidato del liberalismo y simpatizante del Pacto Histórico de Gustavo Petro. Mientras que para el Senado dividió su corazón entre los aspirantes foráneos Jaime Durán de Santander y Mario Castaño de Caldas, ambos del ‘partido rojo’.
Mientras que todos en el DPS - excepto Pierre – cruzan los dedos y se esfuerzan porque salga elegido el exdirector de Invías, Daniel García, a quien le han anunciado no menos de 15 mil votos en el Tolima, sin embargo, solo tiene el respaldo irrestricto del ‘hombre de la garantía’, el siempre fiel uribista Milton Restrepo Ruiz, candidato a cámara con el 106 del Centro Democrático.
El otro escenario inexplorado y desconocido de Pierre García, es conocer la realidad política de cada sector. Luego de firmar un millonario convenio con Proyecta (Empresa para el Desarrollo Territorial del Quindío), con la que se ejecutarán cerca de 60 mil millones en placas huellas y mejoramientos de vivienda en varios municipios del Tolima, hoy los alcaldes, aunque agradecidos con las inversiones, desconocen el modelo de contratación de esas obras, los dolientes o con quién entenderse para algo elemental: hacer las socializaciones de esas gestiones y ganar réditos con sus electores.
Más adelante Contrapeso se ocupará de investigar, qué será lo que tiene de bueno y atractivo esta empresa del eje cafetero, a la que le han inyectado gruesas sumas de dinero desde Prosperidad Social vía convenios, para responder por obras de infraestructura en varias zonas del país.
Pierre se ‘proyecta’
Ante esa circunstancia, lo que no ha quedado claro, es que los mandatarios locales posan para la foto motivados por los anuncios y la viabilidad de los proyectos, pero al no tener manejo presupuestal directo sobre las inversiones, no existe estímulo alguno para acompañar la candidatura del “viceministro” de la Prosperidad Social.
La tercería que podría encarnar Pierre García en el Tolima, en realidad se ‘proyecta’ como una candidatura antibarretista, que busca enamorar a todo aquel que no tenga afinidad con el exgobernador Óscar Barreto, nicho que hace rato conquistó Mauricio Jaramillo Martínez y el denominado Toconbar: Todos contra Barreto.
García pretende recoger a partir del 14 de marzo, a esas credenciales que sean elegidas o reelegidas para liderar un nuevo proceso distante también del Jaramillismo, esperanzados en que Gentil Gómez llegue al congreso y pise fuerte en las decisiones futuras de la colectividad roja. El plan de los García hace rato es destronar de la jefatura liberal a Mauricio Jaramillo.
Sumado a eso, el otro ‘palo en la rueda’ sería el director del DPS Tolima, Duberley Ramírez, con quien tiene irreconciliables diferencias y no ha logrado capitalizar muchos de sus logros, en virtud a que este profesional natural de Planadas y posible candidato a la asamblea o alcaldía de ese pueblo, le ‘ha bajado la caña’ al decir que no se puede mostrar como un salvador de las inversiones.
Muchas de estas gestiones, son producto del trabajo del Centro Democrático en el Tolima, en cabeza del propio Milton Restrepo y la Dirección Territorial de la entidad.
Así las cosas, pasadas las elecciones de marzo y con el nuevo mapa político sobre la mesa, es prácticamente imposible pensar en una tercería a la Gobernación solo desde la fortaleza del bolígrafo de Pierre en el DPS, del cual muchos se olvidarán después del 7 de agosto.